Sin proponérselo, el autor pone el dedo sobre la llaga de una de las principales raíces de la actual crisis financiera. La obligatoria conversión de la moneda, de pesetas a euros en poco tiempo, trajo una escalofriante e imperiosa necesidad de blanquear grandes bolsas de dinero negro, muchas de ellas de origen dudoso. Hecho que provoca el inicio de la gran burbuja inmobiliaria que sufre este país. Una gran organización delictiva pone gran empeño y cuidado en escoger y reclutar sus peones, pero hay un error en esta esmerada selección al no tener en cuenta el complicado mecanismo de la conciencia humana.La trama deja al descubierto una serie de personajes corruptos movidos por la ambición