Este hecho de la historia medieval es narrado por Eliot con un aire de grandeza antigua, en escenas de ritmo lento, parsimonioso, que al mismo tiempo poseen una gran tensión y majestad a medida que se aproxima el trágico desenlace.
Quien es quizá el más grande de los poetas modernos nos ofrece una obra maestra, símbolo de la dignidad de la persona y de la libertad de conciencia frente al poder político.