La idea para Agencia de viajes Lemming, un recorrido imaginario por los más improbables destinos turísticos, salió exclusivamente de la cabeza de José Carlos Fernandes, aunque sea un homenaje asumido a Las ciudades invisibles de Italo Calvino, esa obra maestra de la imaginación, la inteligencia y el profundo conocimiento de la arquitectura de las relaciones humanas.
Igual que Calvino, José Carlos Fernandes también habla de lo que tenemos más cerca, aunque parezca deambular por mundos distantes. Y desde Dulia, la ciudad que busca desesperadamente tener algún elemento interesante, a la inhóspita Manzil, que crece como un tumor a pesar de que todos sus habitantes quieran abandonarla; desde Gallupi, ciudad de humores volubles y estatuas retiradas, a Kwinz, la ciudad de los cementerios, nos encontramos con una geografía de lugares distantes que resultan estar demasiado cercanos; de ciudades nunca vistas que, al final, conocemos demasiado bien.
Quien disfrute con el José Carlos Fernandes de La peor banda del mundo se va a encontrar aquí con múltiples puntos de contacto, del trazo a los colores, de los nombres exóticos a la ironía venenosa, pasando por la alternancia ejemplar de discurso directo e indirecto. Pero Agencia de Viajes Lemming tiene una característica única en la obra de José Carlos Fernandes: manteniendo una línea argumental, va alternando ritmos narrativos, mezcla el relato corto con la historia más larga y, sobre todo, se aleja en dos o tres casos del tono de burla maliciosa, marca de la casa.