Gracias a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo-AECID, La Fábrica Editorial publica la obra de autores internacionales como Zwelethu Mthethwa.
Zwelethu Mthethwa es pintor y se nota. Ya en sus primeras fotografías dio a conocer su inclinación por la composición cuidada y por el color hábilmente manejado y dosificado
como expresión de intimidad con el alma. El color como luz. Sus imágenes, por lo demás, traicionan desde su planteamiento los elementos de un clasicismo muy elaborado.
Cuadros en un estilo insólito desde hace siglos, que deberían habitar las galerías de teóricas casas familiares, castillos, mansiones. Cuadros que se proyectan hacia el futuro, es decir, hacia la inmortalidad, como algunas personas parecen habitar un pasado que prorroga la memoria.
Una inmortalidad doble, por su carácter necesariamente temporal y contingente. Sin duda, ni los escenarios ni la vestimenta ni las pausas sobrevivirán al paso del tiempo, pero la historia que queda capturada, esa historia no dicha y no escrita, esa historia tácita que se oculta en la imagen y a la que se enfrenta la mirada del fotógrafo es, por emplear una expresión predilecta del también fotógrafo y artista sudafricano Santu Mofokeng, una «trampa de sombras». En primer plano encontramos lo que podría pasar por típico, banal, cotidiano, y en el segundo los signos de una escritura paralela que testimonia a menudo la conciencia y su constante vigilia.
Después de graduarse en fotografía por la Michaelis School of Fine Arts de la University of Cape Town (1985), Zwelethu Mthethwa (Durban, Sudáfrica, 1963) obtiene una beca Fullbright para estudiar en el Rochester Institute of Technology (EE.UU.), donde cursa un master en Imaging Arts. Al regresar a Ciudad del Cabo, Sudáfrica, comienza a impartir clases de fotografía y dibujo en la Michaelis School of Fine Arts, tarea que desarrolla entre 1994 y 1999. Actualmente, trabaja como investigador asociado en esta institución.