Londres, 1831. Los liberales españoles sobreviven como pueden allí, acosados por los espías realistas. En la estela de su amada Teresa Mancha y huyendo de la represión del Rey Felón, José de Espronceda se encuentra con los generales Espoz y Mina y José María Torrijos, obsesionados por la libertad de España y dispuestos a dar la vida para acabar con el absolutismo. Ambos cuentan con el apoyo y colaboración de sus mujeres, Juana de Vega y Carlota Álvarez de Torrijos.
Las dos tramas se unen en un final en el que el ansia de libertad y la sed de sangre competirán para vencer en una batalla a muerte en la que el romanticismo será el verdadero protagonista.