En la convulsionada Andalucía del XIX, pocos trayectos se presentaron tan altaneros y retadores como el que, a lo largo de un centenar de kilómetros, transcurría entre Gibraltar y Ronda: abismos insondables, cumbres que se confundían con los cielos, caminos que no eran más que torrenteras y pinos resbaladeros. Bandidos, contrabandistas y aviesos caminantes, formaron también, como costra añeja, parte de un paisaje lleno de escollos en el que tampoco faltaban valles grandiosos, corrientes cristalinas o sorprendentes pueblos.
Atravesando una región todavía olvidada y única, a través de cincuenta y cinco relatos reales e inéditos de ese trayecto, el libro ofrece la oportunidad de adentrarnos por un mundo en el que algo ha cambiado, aunque no tanto como querríamos. Un pormenorizado estudio previo y cien grabados e ilustraciones de la época, ayudarán al lector a realizar sin grandes sobresaltos un placentero viaje en el tiempo.