Pero Andrea no era como ellos. Ella tiene las respuestas a muchas de sus preguntas, aunque todavía no lo sabe.
Muchos años más tarde, el mundo ha cambiado por completo. Los supervivientes de aquella lejana noche y sus descendientes tratan de salir adelante en una sociedad que vive sobre las ruinas de lo que un día fue la humanidad. Pero de repente la vieja amenaza de décadas atrás reaparece, aunque ahora ligeramente cambiada: el número VEINTE parece tener una importancia especial en esta ocasión.
Atrapada en su propia historia y sin saber que el destino del mundo está en manos de un puñado de jóvenes, Andrea y sus amigos comienzan su peculiar odisea, a través de un territorio transformado y lleno de peligros, buscando poner solución a algo que nunca debería haber ocurrido.