EL POETA El poeta de los lirios, los jazmines y las azucenas El poeta encastrado en las entrañas de Granada El poeta de la barraca con el lejano llanto de la guitarra y el romance del romancero, la seguiriya y la casida El poeta vivo, cuya vida sesgaron Cuán más habrías dado a tu tierra Herido de muerte estabas por la cornada de un odio ruin, bilioso, de tu genio y tu grandeza Muerto fuiste, por toros de tu tierra Inefable traición, y tragedia Sí, muerto te quedaste, y no se sabe dónde No te enterraron entre los naranjos y la hierbabuena, ni bajo una veleta Mas no pudieron enterrar el recuerdo de tu brisa, por los naranjales ni el fulgor de tu sangre en un manto de violetas.