En una época en que los métodos naturales curativos y la visión unitaria integral entre el ser humano y la Naturaleza se convierten para muchos en una necesidad cada vez más importante, también aumenta el interés por conocer a los fundadores de este pensamiento. Una de estas figuras es Teofrasto Paracelso (1493-1541), uno de los espíritus más inquietos y controvertidos del Renacimiento, que, en su lucha contra la física aristotélica y la medicina clásica, sentaría las bases de la medicina experimental moderna. Pero también como heredero de la mística de la Edad Media y adepto a la magia natural y a la alquimia, la doctrina de Paracelso influirá definitivamente a través de Böhme y Weigel en toda la teosofía moderna. Por otra parte, para Carl Gustav Jung, «en su filosofía yacen puntos de partida para problemas religiosos, psicológicos y filosóficos preñados de futuro y que sólo en nuestra época empiezan a cobrar claridad».
La presente selección de los textos de Paracelso, que Jolande Jacobi publicó por primera vez en 1942, fue realizada con el apoyo de C. G. Jung y es una excelente introducción a una obra de difícil compendio. Dos conferencias de Jung, y más de 150 ilustraciones, completan y ayudan a comprender los grandes temas espirituales que trató Paracelso hace más de 500 años y que siguen vigentes para el lector de hoy.
Jolande Jacobi (1890-1973), nacida en Hungría, fue discípula y posteriormente colaboradora de C. G. Jung. Completó su obra con numerosos trabajos propios y fue profesora en el Instituto Jung de Zúrich. Escribió el libro Del reino de las imágenes del alma. Vías y atajos hacia uno mismo (1969) y colaboró también en el volumen El hombre y sus símbolos que, aparecido en 1968, es una de las obras esenciales del pensamiento junguiano.
Paracelso (1493-1541), médico y alquimista suizo, fue «como un misterioso jeroglífico, [cuyo nombre] se tiende a lo largo de la reciente historia del espíritu y mueve a las almas a elevada conversación», según Heinrich Schipperges. El misterio con que revestía sus actos y el secreto en que mantenía sus procedimientos curativos, dieron lugar en su época a opiniones enfrentadas. Paracelso fue también autor de un sistema visionario y teosófico de filosofía. De sus obras se hicieron varias ediciones en alemán y en latín, siendo la primera la de Basilea (1575-1589).