Nos lo temíamos. Isac vuelve a la carga con una nueva entrega de su particular visión de lo que significa ser un buen escritor y un tipo decente. De nada valieron nuestros esforzados intentos de que no volviera por la editorial y dedicara el resto de su vida a algo más provechoso como sacarse una oposición o cultivar un pequeño huerto, porque él insiste en que es una celebridad entre su comunidad de vecinos y no piensa renunciar ahora que ve con ello su carrera prácticamente encarrilada. Esto con lo que nos viene ahora es una colección de diecinueve relatos de ficción y misterio cuya característica más sobresaliente, después de haberlos examinado en profundidad, es la curiosidad de que sean diecinueve relatos y no veinte, que cuestan lo mismo y siempre queda como más redondo. Él dice que sí, que tiene otro muy bueno y muy bien elaborado pero que lo guarda para el libro siguiente porque le da pereza comenzar de cero y así tiene algo empezado para su próxima publicación, que en lo posible evitaremos.