Novela de acción y terror en el que un pequeño grupo de trabajadores en una aislada base petrolífera del Ártico se convierte en el último reducto de la civilización humana cuando la población mundial es aniquilada por una plaga apocalíptica.
Una plataforma petrolera medio abandonada y en ruinas, atracada en un remoto lugar del océano Ártico, está a punto de ser cerrada. Una tripulación reducida aguarda la nave que los llevará a casa.
Pero el mundo más allá de este gélido páramo ya no es el que recuerdan. Un siniestro virus se propaga por el planeta a toda velocidad. En cuestión de días, se ven asoladas ciudades enteras. Los contagiados, irreconocibles, se convierten en una horda rabiosa y casi indestructible.
Uno por uno los canales de televisión y radio que unen la tripulación a lo que queda de la civilización humana dejan de retransmitir.
El silencio invade las ondas. La incomunicación es total. Y el largo invierno en el Ártico solo acaba de empezar.
Atrapados en los confines de la tierra, quince hombres y mujeres se enfrentan al panorama desolador del hambre y la hipotermia, inconscientes aún de que la plaga apocalíptica que ha devastado al resto del planeta viene directo hacia ellos.