«Nos retiene y deslumbra hasta la última página con su aguda percepción de la vida contemporánea, y su implacable suspense» (P. Kemp, The Sunday Times).
«Las incitaciones a reflexionar sobre el cambio climático abundan, y nos apremian. La opción que ha tomado McEwan es tan sorprendente como elegante; en lugar de elegir el Apocalipsis, opta por la comicidad» (Christopher Tyler, The Guardian).
«Una obra maestra de la sátira» (Lorna Bradbury, The Telegraph).