La belleza hace parte fundamental de la mente humana común. Cada vez que nos emocionamos por algo percibido, pensado y/o realizado -cuando se manifiesta como un desafío a aquello que está anclado en lo profundo de cada uno de nosotros y, al mismo tiempo, se acomoda bien a nuestra mente-, es la prueba de esto. Sin embargo, algunos tienen la falsa idea de que lo bello sólo se puede manifestar como algo complejo, como si lo simple no pudiera ser estéticamente impactante.
Los microrrelatos y los aforismos (así como otras manifestaciones artísticas), prueban que lo simple también puede ser bello. Estos pretenden ser textos sencillos, tanto en palabras como en ideas, pero tienen la intención de ser emocionalmente intensos y profundos, tal como cualquier obra de arte.
Ser artista de pocas palabras es una compilación de 95 pequeños textos, entre microrrelatos y aforismos, que hablan sobre diversos asuntos humanos: amor, trabajo, política, cuestiones psicológicas y filosóficas, entre otros temas; un libro que invita al lector a arriesgarse a mostrar la belleza de su mente, a ser un artista.