Argumento de Sentidos de la Vida
¿Animal racional, pulsional o cultural? He aquí una reflexión sobre la construcción del sujeto, las concepciones del yo y la identidad personal, desde tres perspectivas teóricas: la filosófica, la psicoanalítica y la antropológica. En Los sentidos de la vida, Joan Prat propone tres modelos ideales de construcción del yo a lo largo de la historia y en áreas geográficas bien dispares. El primero, la concepción providencial, se basa en el principio «Uno es aquello que está destinado a ser» por la providencia, el azar o el destino y, en otras culturas, por los espíritus o los antepasados: las vidas de santos, conversos, místicos, iniciados, visionarios y chamanes son ilustrativas de este modelo. El segundo, la concepción individualista o romántica, responde a la máxima «Uno es aquello que desea (y puede) ser» e inspira las autobiografías de los hombres y las mujeres que se perciben a sí mismos como dueños de su propio destino. El tercero, la concepción sociocontextual, se sostiene en la idea de que «Uno es aquello que le ha tocado ser» de acuerdo con el entorno en el que ha nacido y vivido; en él se fundamenta el método biográfico de antropólogos y sociólogos, y lo ejemplifican los relatos e historias de vida de buenos «salvajes», marginados, excluidos urbanos y otros seres anónimos de las sociedades globalizadas. El problema teórico de la identidad personal se nos presenta también desde tres perspectivas: los que piensan que la identidad es una esencia; los que, por el contrario, creen que es una ficción, y finalmente, los que la ven como una construcción, ya sea social, personal o psicológica. Los sentidos de la vida combina con originalidad diversas perspectivas teóricas y una bibliografía muy variada, en una especie de no mans land pluridisciplinar que hace amena su lectura, sin perder por ello rigor ni profundidad.0