Rumania es un país singular en el variado conjunto europeo: es el único país de lengua romance al este de Europa, y también el único latino con una fuerte tradición ortodoxa. Mircea Eliade dice que los rasgos dominantes del alma rumana son la bondad, la tolerancia y la hospitalidad, rasgos que confirman sobradamente los autores de esta guía. Rumania, además del enérgico y célebre Drácula, es monasterios de paredes bellamente decoradas en Bucovina, balnearios a orillas del mar Negro, más de mil kilómetros de Danuvio que navegar, iglesias de madera en Transilvania, desfiladeros bellísimos en la región de Maramures..., todo ello sin olvidar el variado y rico folclore.