La obra es una invitación a repensar los derechos de los migrantes "desde abajo", es decir, a releer la manera en que estos han sido planteados por los Estados y organismos internacionales, y a considerar las prácticas que, para agenciar sus derechos, concretan los migrantes desde sus realidades, en sociedades que buscan controlar la migración internacional y sus efectos.