June Han se ha forjado una vida a miles de kilómetros del lugar donde nació: ha montado su negocio en Nueva York. Pero en su pasado hay secretos de los que no ha hablado jamás con nadie, y treinta años después de escapar de una Corea destruida por la guerra, ha llegado la hora de enfrentarse a ellos. Hector Brennan, «un fracasado de principio a fin», es el hombre que hace ya mucho tiempo salvó la vida de June. Y entre June y Hector está la historia de la hermosa y desgarrada Sylvie Tanner, cuyo amor perseguían ambos. En una travesía que los lleva desde una Corea en ruinas hasta un antiguo campo de batalla italiano, June y Hector van en busca de su pasado, unidos por un legado de espanto, violencia y amor. Chang-rae Lee propone una profunda meditación sobre la naturaleza del heroísmo y el sacrificio, el poder del amor y la posibilidad de salvarnos, de rendirnos el uno al otro.
Chang-rae Lee (1965), nació en Corea del Sur y emigró a los Estados Unidos con su familia cuando tenía tres años. Su primera novela, En lengua materna, publicada en esta colección, fue premiada con el PEN Hemingway Award, el Oregon Book Award y el American Book Award, entre otros galardones, mientras que las revistas The New Yorker y Granta lo destacaron como uno de los más prometedores escritores del nuevo siglo. «Una novela vigorosa y poética que llega hasta la raíz de aquello en lo que indaga... Excelente» (Marcos Giralt Torrente, El País); «Escritura especialmente afilada y perturbadora» (Manuel Ollé, ABC). Con su segunda novela, Una vida de gestos, se consagró como una de las voces más originales y ambiciosas de la literatura norteamericana contemporánea: «La angustia y el esplendor de una prosa que fluye sin desmayo, apretada de significaciones y consoladora como el sueño de opio que trata de espantar el acoso de una pesadilla» (Juan Manuel de Prada, ABC); «Muchos críticos le han comparado a Kazuo Ishiguro. Un nuevo valor seguro en la literatura contemporánea» (Isabel Núñez, La Vanguardia). Desde las alturas es su tercera novela: «La primera novela suya que me engullo, y debo decir que, a partir de ahora, me cuento entre sus seguidores más fieles. Altísima temperatura literaria. La prosa, magnífica. A Lee le han comparado con Updike. Por derecho propio ya forma parte de la pléyade de los más grandes» (Jordi Llavina); «La cristalina prosa de un joven maestro» (Rodrigo Fresán, Página 12).
«Una escritura brillante... Una novela en más de una ocasión conmovedora» (James Wood, The New Yorker).
«Hermosa, punzante, imposible de olvidar» (Kate Christensen, Elle).
«Magistral, poderosa y conmovedora, de lectura compulsiva, pero impregnada de un profundo sentido moral» (Publishers Weekly).