La actual reforma, ha sido operada a través de la Ley 14/2014, de 24 de julio, de Navegación Marítima hace necesario repensar y sistematizar la nueva normativa aplicable a los principales acuerdos de la navegación. Esta obra ofrece un completo análisis de las formas contractuales a través de las cuales se articulan los acuerdos que la normativa toma como arquetipos.
Además de ello, esta clase de transportes, juega un papel central en la consecución del principio de continuidad territorial, cubriendo una importante función de interés público; al mismo tiempo, la prestación de tal servicio ha de considerarse a la luz de la normativa de defensa de la competencia. La Ley de Navegación Marítima ha permitido superar la anticuada regulación del Código de Comercio de 1885, toda vez que la interpretación de la nueva Ley ha de ser armonizada con los Reglamentos comunitarios sobre la responsabilidad de los transportistas de viajeros por mar en caso de accidente, R. (CE) 392/2009- y sobre los derechos de los viajeros que viajen por mar y por vías navegables, R. (UE) 1177/2010-, así como con la normativa nacional e internacional en materia de seguridad.
Dichas normas han supuesto la modernización de la disciplina por lo que respecta a la responsabilidad y a los derechos de los