Estamos a principios del siglo XXI y las organizaciones denominadas nacionalistas parecen tener un peso trascendental en nuestra vida política. En oposición a ellas otras organizaciones defienden el concepto de nación española como justificación del Estado. En este ensayo el autor cuestiona si "la nación", sea cual sea ésta, es un concepto trasnochado. El autor justifica que debe abandonarse toda disputa entre "naciones" a fin de construir una sociedad para las personas, proponiendo la supresión en la Constitución de toda referencia a la nación.