Las estrategias van complicándose de manera progresiva desde las representaciones lineales hasta los problemas llamados de respuestas tentativas, pasando por los de tablas de doble entrada y los de simulación de situaciones.
Todas estas estrategias contribuyen a cumplir con el principio de "Cabezas bien hechas mejor que cabezas bien llenas".
Cuando los chicos y chicas aprenden a dar respuesta a estos problemas no olvidan nunca el procedimiento, igual que no olvidan cómo leer, escribir o sumar. Y, por tanto, el aprendizaje no sólo sirve para su vida académica, sino también para resolver problemas personales y laborales.