Después del ataque a su aldea, Tarek es encontrado bajo el cuerpo de su madre por una hechicera. Pasados los años, durante una cacería, se ve obligado a luchar contra un lobo por una pieza de caza, y en el transcurso de la pelea caen los dos gravemente heridos. La hechicera entonces, decide trasladarlos a su cueva para realizar un ritual que les permita seguir con vida, e introduce el alma del lobo en el cuerpo de Tarek.