Esta es la historia de quien permite que sus propios demonios cobren vida, hablen, siembren en cierta manera el caos, con los problemas y dudas que eso genera. A partir de ahí, se comienza un proceso, un camino. Poco a poco, el personaje de la historia, aunque tenga baches, y a veces caiga en pensamientos de frustración, miedo, y culpa, va, poco a poco, aprendiendo a ser feliz y a confiar. A quererse y querer al otro, que solo es un espejo de sí mismo. Este libro de poesía refleja parte de ese camino de auto exploración que nos lleva a cuestionamos viejas creencias limitantes, sobre las relaciones, el amor y la vida en general.