Un buen ejemplo es Pensamientos en el camino, del filósofo, teólogo y pedagogo Bert Hellinger, humanista que nos ofrece unos pensamientos siempre abiertos, en tránsito, en camino hacia algo nuevo. El lector los enriquece al encontrar nuevos significados.
Al mismo tiempo, Hellinger considera que estos pensamientos continúan abiertos, en tránsito, todavía en camino de algo nuevo. Por eso, la mejor forma de comprenderlos es exponerse «a la plenitud de lo que se manifiesta y dejarla obrar en su intimidad, sin prejuicio, sin premeditación, sin miedo. Al cabo de un rato, la plenitud se va estructurando y pasa a primer plano, lo que es esencial para nuestra vida».
BERT HELLINGER estudió filosofía, teología y pedagogía, y trabajó durante dieciséis años como miembro de una orden misionera católica en Sudáfrica.
Después se hizo psicoanalista, y llegó a configurar su propia terapia sistémica y familiar a través de la dinámica de grupos, la terapia primaria, el análisis transaccional y diversos procedimientos hipnoterapéuticos.
Hellinger actúa mucho más allá de su campo especializado al transmitir de modo claro y reproducible cosas esenciales sobre los órdenes del amor y de la vida.