Argumento de Papá Es Peter Pan y lo Tengo que Matar
César un triunfador, adicto a sí mismo, que presume de filósofo urbano y que, en el fondo, no es nada más que un infeliz que no logra quererse se despierta una mañana y comprueba que una prostituta, a la que tuvo la insensatez de meter en su casa, se la ha desvalijado, llevándose todos los objetos que le definían como ser humano y dejándole con el problema de explicarle lo sucedido a su mujer. Lo único que queda en la casa es un espantoso arlequín pintado por su suegro. El robo actúa como detonante de una serie de conversaciones telefónicas y con el mismo arlequín, que hace las veces de confidente desdibujado en las que César ve redefinidas sus relaciones con su mujer, su amante de veinticinco años, su hija de diecinueve y la puta que le ha dejado sin nada.0