Argumento de Ordenando la ética
R. M. Hare afirma en el prefacio: «Ofrezco esta taxonomía de teorías éticas a todos aquellos que se hallan perdidos en el laberinto moral, entre los cuales están muchos de mis colegas filósofos. Al igual que aquellos que disertan pomposamente sobre cuestiones morales en los medios de comunicación, estos colegas filósofos están perdidos porque no disponen de un mapa del laberinto. Mi libro se propone justamente ofrecer ese mapa.» Ordenando la ética es un estudio lúcido y apasionado que nos ofrece uno de los filósofos morales más influyentes del siglo acerca de las distintas teorías éticas que hay. Constituye, por otro lado, un repaso definitivo de la posición ética fundamental del propio Hare. La idea principal del libro es que no vamos a lograr que el pensamiento moral sea objetivo planteando las cuestiones morales como cuestiones de hecho; tal planteamiento conduce inevitablemente al relativismo y nos ata a las culturas y a los lenguajes particulares. Lograremos, más bien, que sea objetivo poniendo de relieve el carácter universalmente prescriptivo del lenguaje moral, que todas las culturas pueden compartir y, por tanto, utilizarse para resolver sus diferencias morales. Una prescripción moral objetiva, como vio Kant, consiste en una prescripción que todos los seres racionales pueden aceptar. Traducción de Joan Vergés Gifra0R. M. Hare afirma en el prefacio: «Ofrezco esta taxonomía de teorías éticas a todos aquellos que se hallan perdidos en el laberinto moral, entre los cuales están muchos de mis colegas filósofos. Al igual que aquellos que disertan pomposamente sobre cuestiones morales en los medios de comunicación, estos colegas filósofos están perdidos porque no disponen de un mapa del laberinto. Mi libro se propone justamente ofrecer ese mapa.» Ordenando la ética es un estudio lúcido y apasionado que nos ofrece uno de los filósofos morales más influyentes del siglo acerca de las distintas teorías éticas que hay. Constituye, por otro lado, un repaso definitivo de la posición ética fundamental del propio Hare. La idea principal del libro es que no vamos a lograr que el pensamiento moral sea objetivo planteando las cuestiones morales como cuestiones de hecho; tal planteamiento conduce inevitablemente al relativismo y nos ata a las culturas y a los lenguajes particulares. Lograremos, más bien, que sea objetivo poniendo de relieve el carácter universalmente prescriptivo del lenguaje moral, que todas las culturas pueden compartir y, por tanto, utilizarse para resolver sus diferencias morales. Una prescripción moral objetiva, como vio Kant, consiste en una prescripción que todos los seres racionales pueden aceptar.