"Mi poema a Preciosa y el aire No te tengo miedo, Viento ni quiero que me defienda el cónsul de los ingleses. Ni que me den a beber ginebra, ni tibia leche. No te tengo miedo, Viento, corre, corre, ven a verme, toca mi cuerpo desnudo, mi vientre de nácar hierve. Ven a enredarte en mis muslos y en mi cintura caliente. No tengo miedo a tu espada ni a ese fuego que te pierde. Mis pechos tiemblan desnudos, la boca se me humedece. No te tengo miedo, Viento, ni quiero que titubees. Ven al punto, no te pares, ni que te detenga el Frente, ven a beber de mis labios de estos besos que te muerden. No te tengo miedo, Viento."