«Todos los beneficios de esta edición se destinarán a una organización solidaria» Imaginemos por un momento que no gozamos de tanta libertad como creemos, que la esclavitud no se ha erradicado, sino que tan solo ha cambiado de forma y que además somos los principales causantes de esta situación. Si tan solo nos lo imaginamos, nada cambiaría, pero ¿qué pasaría si sospechamos que es cierto y empezamos a cuestionar hasta nuestras propias ideas? Dicen que la lógica permite obtener conclusiones ciertas a partir de premisas, pero cuando la aplicamos obtenemos conclusiones muy diferentes a las comúnmente aceptadas, ideas a veces sorprendentes y a veces transgresoras. ¿Es posible que la certeza no sea lo que pensábamos?