Esta novela nos presenta la historia de dos mujeres a las que el azar, como mano implacable del destino, marcará a lo largo de ambas vidas, tras un primer encuentro fortuito en la infancia y en la sociedad de la posguerra tan radicalmente clasista. Lucrecia, hija de una mujer mala , hija del pecado, carne de infierno, niña anatematizada, despreciada y humillada. María, hija de un emblemático médico de pueblo, querida y respetada.