Primero fue la subida del petróleo, después la escalada de los tipos de interés y por último, el descalabro de constructoras y promotoras junto con las turbulencias del sector financiero. Hay muchos tipos de empresas que se dedican al cobro de deudas, pero lo que básicamente las diferencia entre sí es el procedimiento que emplean. Por un lado, se encuentran las que a través de métodos menos ortodoxos consiguen saldar los impagos y, por otro, está