Lucy Sullivan se casa. Pero Lucy siempre ha sido poco afortunada en amores. Es más, Lucy ni siquiera tiene novio. Sin embargo, la señora Nolan, experta echadora de cartas, le ha pronosticado un inminente matrimonio...
Al recibir la noticia de la predicción del inminente matrimonio de Lucy, sus entrañables amigas y compañeras de fatigas se sienten algo consternadas: la anunciada boda de Lucy puede poner fin a las alegres andanzas del grupo, a sus borracheras, sus comilonas, su incansable e infructuosa búsqueda de hombres... Lucy se apresura a tranquilizarlas: a parte del ligero inconveniente de que no hay ningún príncipe azul en su vida, tiene ya suficientes problemas familiares y personales como para pensar demasiado en el tema.
¿Se cumplirá el vaticinio de la adivina?
La crítica ha dicho...
«Sencillamente encantadora... Cada frase de esta cautivadora novela resuma un finísimo sentido del humor.»
The Chicago Tribune