Entre agosto de 1936 y febrero de 1939, voluntarios rusos combatieron al lado de la
República española. Además de los propiamente rusos, entre ellos había bielorrusos,
ucranianos, osetios, georgianos, azerbaiyanos, uzbekos, y otros muchos del total de
Repúblicas Socialistas federadas y autónomas que conformaban la URSS. Sin embargo, a
todos ellos en España se les conoció como «los rusos» porque los ciudadanos españoles
de la época así lo percibieron y porque así lo rememoraron después.
Setenta años después de finalizada la guerra civil española aún existe un amplio
desconocimiento sobre la realidad concreta de la participación de Rusia en esa guerra, y
quedan también algunas cuestiones polémicas por resolver para los historiadores. Tanto la
exposición organizada por la Fundación Pablo Iglesias como el catálogo que la acompaña,
aportan una extensa documentación así como estudios basados en fuentes, muchas de
ellas hasta hace poco inaccesibles a los investigadores, sobre las cifras y hechos, y ante
todo sobre las personas asesores, pilotos, tanquistas, soldados, intérpretes... que
lucharon junto a los españoles en defensa de la República.