Un padre que se va y la espera del regreso que se alarga toda una vida en un pueblo que se torna fantasmal entre una jauría de perros que todo lo vigila. Los perros de Copacabana dominan la escena y las calles polvorientas del pueblo, que dirime su destino entre la desazón, la pesadumbre y la esperanza de algunos pocos habitantes de que el resurgimiento llegue...