Cada mañana María Dolz desayuna contemplando a una pareja de desconocidos; la armonía que irradian, su elegancia y simpatía ayudan a María a iniciar su jornada laboral. Pero una mañana se le atraganta el desayuno con la noticia del asesinato del componente masculino de la feliz pareja. El embriagador estado de enamoramiento, la presencia casi permanente de los muertos en la vida, la memoria o la imposibilidad de conocer la verdad en su totalidad son algunos de los temas sobre los que reflexiona Marías en esta novela de trazo firme y prosa brillante y cautivadora, digna de figurar entre las mejores de su autor.