Todos podemos ser magos angélicos porque la magia es parte de la vida real, de lo que es. Pero lograrlo depende pura y exclusivamente de un despertar espiritual que no todos alcanzamos. Ese despertar consiste en algo tan simple como darse cuenta de que los ángeles están aquí, entre nosotros, y que por eso es posible como en los cuentos de hadas convertir en realidad nuestros deseos. Los ángeles y la magia es una guía útil en esa dirección que, además de haber aproximado al lector al mundo purísimo de los ángeles, logra, simultáneamente, purificar sus emociones y lo hace sentir seguro de su mayor bien: el espíritu. No olvidemos que la experiencia con los ángeles es persona y que una vez que se entra en contacto con ellos, esa vivencia queda grabada de por vida.