Bécquer, el gran representante del posromanticismo español de la segunda mitad del siglo XIX, logró publicar sus leyendas, relatos y algunos poemas en varios diarios y revistas de Madrid, a la vez que trabajaba en ellos de redactor y publicaba sus artículos de crítica literaria y otros temas. En concreto, las Leyendas de Bécquer aparecieron entre 1858 y 1864. En ellas, Bécquer no se limita al gusto romántico por lo fantasioso y popular de las leyendas tradicionales, sino que crea una verdadera prosa poética, al dotar a sus relatos de un lirismo evocador, de una atmósfera de irrealidad que nos introduce sensualmente en el mundo de lo mágico y lo maravilloso.