¿Quién no ha jugado en su infancia a policías y ladrones? Pero en el caso del niño afrikáner Boetie Swanepoel, el juego ha ido demasiado lejos. Cuando su cadáver aparece mutilado en una plantación a las afueras de Trekkersburg, todo hace pensar en la obra de un pervertido sexual: hasta que la aparición de una oruga extrañamente biseccionada desmonta la teoría y apunta a que se trata de un crimen premeditado. Pero, ¿quién podría estar interesado en acabar con la vida de un niño de doce años? O más bien ¿quién no lo estaría si el empeño de ese niño es descubrir una verdad que a nadie le interesa en absoluto que se conozca? El teniente blanco Kramer y su fiel sargento de color Zondi lucharán por resolver el misterio.
El leopardo de la medianoche del sudafricano James McClure es una auténtica novela de culto para los amantes de la novela negra.
«Curioso el modo en que uno podía afirmar ciertas cosas, cuando otras eran impenetrables. Pero las estadísticas respaldaban a Zondi en este caso; era prácticamente imposible que un niño blanco fuese violado y asesinado por un negro. De hecho, Kramer dudaba de que hubiese ocurrido nunca. Por cierto, curioso, también.»