«Muchos de los manuscritos sobre anatomía humana están en posesión de Francesco Melzi, un gentilhombre de Milán que era un hombre bello en el tiempo en que Leonardo vivía y al que le profesaba un gran cariño. Francesco aprecia y conserva estos trabajos como reliquias de Leonardo, junto con el retrato de este artista en su feliz recuerdo.»
Con estas palabras Giorgio Vasari, uno de los primeros historiadores de arte y autor de las biografías de los artistas italianos durante el Renacimiento, asegura que existe un retrato de Leonardo da Vinci que Francesco Melzi, alumno, secretario y ayudante del artista florentino, guardó al morir el maestro. Por lo tanto tenemos una referencia histórica real de dicha imagen.
¿A qué retrato se refería Vasari? ¿Al supuesto autorretrato que guarda la Biblioteca Real de Turín y que mundialmente se reconoce como tal?, ¿o por el contrario al retrato que realizó Francesco Melzi mientras su maestro seguía con vida? ¿Son compatibles ambos retratos? ¿Coinciden esas imágenes con el resto del imaginario de Leonardo da Vinci, tales como El hombre de Vitruvio de Venecia o La última cena de Milán? ¿Es Leonardo el creador y el modelo de la Sábana Santa de Turín?
A través de estas páginas repasaremos todas las teorías que eruditos, historiadores y expertos en arte han elaborado en torno a la imagen del artista florentino y, ¿quién sabe?, encontrar el verdadero rostro del polímata más conocido de la historia de la humanidad: Leonardo da Vinci.