El destino del mundo está en las peores manos posibles
León González cumple los tres requisitos indispensables para ser una potencial arma de destrucción masiva: no tener referencia moral ni guía en la vida, ser de inteligencia distraída (tonto, según la gente de la calle) y tener poderes que no sabe controlar.
El reloj del apocalipsis se ha puesto en marcha y por ello tres fantasmas serán enviados para avisar a León del importante papel que le ha tocado desempeñar: salvador o destructor del mundo.
Por ello, nuestro antihéroe iniciará una aventura en la que tendrá que lidiar con psicópatas, médiums, resucitados, espíritus cabreados, sectas satánicas, gánsteres de medio pelo, arcángeles, un diablo que ansía su alma por encima de todas las cosas e incluso la misma Parca.
El objetivo será encontrar el Grimorio del Nazareno, un libro de hechizos que la familia González atesora desde tiempos inmemoriales, y que podría hacer que los poderes de León fuesen totalmente ilimitados.
El destino del mundo está en las peores manos posibles