Argumento de Las Posesiones
La narradora de Las posesiones viaja de Barcelona a Palma para
pasar unos días en familia y tranquilizar a su padre, a quien la
jubilación y unos problemas con un vecino tienen al borde del
colapso. Mientras trata de entender su extraño comportamiento, se
reencuentra con un antiguo amante y mentor, y recuerda un macabro
suceso acaecido a principios de los noventa en el que un exitoso
empresario madrileño, socio de su abuelo, mató a su mujer y a
su hijo y luego se suicidó.
Locura, exceso de celo, depresión, la protagonista se pregunta por
los abismos que esconde cada ser humano. Y muchas de las cosas
que ha vivido, especialmente en sus relaciones sentimentales, se le
revelan ahora de una manera diferente.
Enlazando con pericia tres hilos narrativos distintos ?que nos llevan
de la crisis del periodismo a la corrupción de los noventa
pasando por la educación sentimental de la protagonista?,
Las posesiones es una novela sobre aquello que perdemos mientras
maduramos, mientras aprendemos que «crecer consiste en
esto: no tener adonde volver».0