??Fue la casualidad la que hizo que me ocupara del tema de la formación de los Evangelios. Y después me dejé guiar por la lógica del trabajo. Traduciendo los textos de Qumrán, comprobé que existían muchas relaciones con el Nuevo Testamento y para cada referencia preparaba una ficha. Una vez terminada la traducción, me encontré con una enorme cantidad de fichas y se me ocurrió que podría utilizarlas escribiendo un ?comentario del Nuevo Testamento a la luz de los documentos del Mar Muerto?. Quise comenzar por el Evangelio de Marcos. A fin de facilitar la comparación entre los Evangelios griegos y los textos hebreos de Qumrán, intenté, simplemente para mi uso personal, ver lo que daría Marcos retraducido al hebreo de Qumrán. Me imaginaba que esta traducción sería muy difícil a causa de las considerables diferencias entre el pensamiento semítico y el griego. De ahí que me sorprendí constatando que, al contrario, la traducción resultaba muy fácil. Solo después de un día de trabajo, a mediados de abril de 1963, estaba ya convencido de que el texto griego de Marcos no pudo haber sido redactado directamente en griego, sino que, en realidad, era simplemente una traducción del original hebreo. ?? Jean Carmignac Traductores: Joanna Jakubowska Elías y Felipe Sen.