"Muchas sociedades han desarrollado sofisticados rituales y prácticas meditativas como forma de acoger y alentar el crecimiento espiritual. Algunas de las contribuciones más bellas y valiosas al mundo del arte y de la arquitectura celebran este espacio místico.
Para algunos, sin embargo, el viaje renovador del desarrollo espiritual se convierte en una "emergencia espiritual", una crisis en la que los cambios interiores son tan rápidos y los estados internos tan exigentes que, temporalmente, pueden encontrar difícil funcionar plenamente en el seno de la realidad cotidiana. En un ambiente de apoyo, y con una comprensión adecuada, estos complejos estados mentales pueden ser muy beneficiosos, conduciendo en ocasiones a la sanación física y emocional y a profundas realizaciones."
Christina y Stanislav Grof