La Iglesia teme por la extinción de la fe en detrimento de la razón. Los adoradores del diablo tienen la ocasión de aniquilar la cristiandad. Un antiguo documento, escrito por doctas y católicas manos, puede provocar el fin de todas las religiones. Y los componentes de la Corpus Carus deben mantener esa prueba oculta.
En los albores del siglo xvii empieza una batalla donde el límite entre el bien y el mal es más difuso que nunca. Una batalla sin tregua en la que el sexo, la magia negra, la traición y la ambición de poder son simples monedas de cambio en el tablero sobre el que el bien y el mal pugnan por la supremacía. Una batalla que se libra entre hogueras y castillos. Una batalla donde la fe es una peligrosa arma de doble filo.