Una mujer aparece muerta en un lago helado. Su cuerpo está torturado y presenta una extraña quemadura alrededor del tobillo. Desde el primer instante, la inspectora Anna-Maria Mella sabe que necesita ayuda. El cadáver es de una de las ejecutivas de una compañía minera cuyos tentáculos se extienden por todo el mundo. Anna-Maria necesita que una abogada le explique algunas cosas acerca del negocio, y conoce a la mejor. La abogada Rebecka Martinsson está desesperada por volver al trabajo después de un caso que la ha destrozado, y acepta la propuesta de Anna-Maria Mella. Sus investigaciones revelan una compleja y siniestra relación entre la víctima, su hermano y el director de la empresa. Todo parece indicar un móvil sexual, pero los negocios turbios de Kallis Mining abrirán otra vía de investigación.