Mike Valenzuela, ex marine condecorado y policía de Los Ángeles, había sido tiroteado estando de servicio y en Virgin River había encontrado no sólo un lugar en el que curar sus heridas, sino también la posibilidad de recuperar la esperanza. Cuando aceptó convertirse en el primer y único policía del pueblo, lo hizo siendo consciente de que había llegado el momento de sentar cabeza. Divorciado dos veces y con una lista interminable de amantes, anhelaba en secreto comprometerse con una mujer para siempre. Y descubrió que Brie Sheridan, una fiscal de Sacramento, era la mujer con la que quería compartir su vida.
También para Brie Virgin River se había convertido en un refugio seguro después de haber estado a punto de perder la vida a manos de un violador. A pesar de ser una mujer dura y valiente, a veces no era capaz de dominar el llanto, pero en Mike había encontrado a un hombre dispuesto a demostrarle que podía volver a confiar.