La Religión Griega se ocupa de las creencias y de las prácticas religiosas de la época gloriosa de Grecia, a saber, de los períodos arcaico y clásico. En este libro, informativo y entretenido, Jan N. Bremmer presenta los resultados de la investigación actual sobre la Religión Griega en época clásica. Esta obra ofrece una aproximación no sólo a los dioses, santuarios, rituales, misterios y mitos de la Antigua Grecia, sino además ?y éste es, quizá, uno de los aspectos más renovadores? al papel que los sexos desempeñaban en la sociedad y religión de la época, así como al influjo que los cambios históricos tuvieron en el culto. La Religión Griega de Jan N. Bremmer es también una excelente introducción al estudio de la historia de la religión y del pensamiento antiguos. ¿Existió alguna vez lo que solemos llamar ?religión griega?? Esta pregunta puede parecer, sin duda, extraña. Sin embargo, debe quedar claro desde el principio que la Religión Griega, entendida como un todo monolítico, no ha existido nunca. Cuando -hacia el 800 a.C.- Grecia emergía de la Edad Oscura, las diferentes comunidades habían experimentado una muy diversa evolución social, política y económica, que se reflejaba también en la esfera religiosa. Cada ciudad tenía su propio panteón, en el que unos dioses eran más importantes que otros y en el que algunos, incluso, ni siquiera eran venerados. Cada ciudad tenía también su propia mitología, su calendario religioso y sus festivales. Por tanto, ninguna ciudad de la Grecia Antigua podría considerarse un ?clon? religioso de otra... La Religión Griega adquirió su forma característica de las aproximadamente setecientas poleis que, entre grandes y pequeñas, extendieron la cultura griega desde la España actual hasta el Mar Negro. La independencia de estas ciudades fue disminuyendo a medida que aumentaba el poder de estados como Atenas o Esparta, que, a su vez, vieron menguar la suya con la llegada de Filipo y de sus macedonios. Estos acontecimientos produjeron rápidos cambios en la estructura de la Religión Griega. La Religión griega tiene unas características peculiares que J. N. Bremmer sintetiza de este modo: una religión integrada en la sociedad, pública y comunitaria antes que privada e individual, sin división entre lo sagrado y lo profano, politeísta e interdependiente; mantenedora del orden, ocupada del aquí y del ahora, de transmisión oral y no a través