El personaje dibujado por Tolstoi es Ivan Ilitch, presidente de la Audiencia Territorial. El novelista pinta el mundo ineficaz y baldío de Iván y hace una dura crítica de la aristocracia, que tan a fondo conocía. No solo refleja Tolstoi en esta novela su personal terror a la muerte, sino que revela la profunda compasión que le inspiran los humildes y oprimidos.
Un admirable testimonio sobre la sociedad rusa del siglo XIX.