Humberto, ejecutivo en una empresa de servicios de Madrid, es rechazado por la mujer que ama y despedido de su trabajo poco después. Afectado por el desengaño amoroso y obsesionado por el recuerdo de Ángela, asume con fatalista resignación su precaria situación y abandona, desanimado, la búsqueda de nuevo empleo. Sin dinero, sin ocupación y sin hogar, iniciará un descenso para «... llegar hasta el fondo, buscando la seguridad de saber que ya no puedes caer más...». Para hacer frente a sus nuevas necesidades tendrá que dormir en edificios abandonados, buscar comida en la basura y recoger chatarra para subsistir en un mundo diferente al que hasta ese momento había disfrutado. Esta experiencia y el encuentro con Rodrigo, un amigo de la niñez, le revelarán la existencia de otras maneras de vida, con escalas de prioridades desconocidas para él.