La isla de los quizás, Cuba, esa isla extrema. Esa película que un joven cineasta cubano sueña con filmar para que triunfe en la noche de los oscars y las puertas de Hollywood se le abran, y el cine de su país salga del olvido. Y del ridículo, en una época en que la utopía tiene plomo en las alas.
Ignacio encuentra a su musa cinematográfica, Juana Ortiz, nombre de huérfana Matancera pero con el que ha soportado cuarenta años de sobresaltos. Bautizada por él como Jane, la petite, se inicia una reflexión continua entre los dos que nos habla de la dura e intensa experiencia de esta mujer. Ignacio empieza entonces a ver escenas para su gran película, esa película que los lanzará a la fama. Pero los sueños de Ignacio y de su actriz aún tendrán que escapar de una cárcel abierta al cielo, de una ciudad llamada La Habana.
Con una escritura a veces brutal, un humor amargo y con unas imágenes muy nítidas, Joel Cano nos habla en esta novela de una realidad muy diferente de la que conocemos sobre esta isla extrema, que es Cuba.