La esposa del siciliano. Por mucho que detestara la idea, casarse con Cesare Santorino era lo que más había deseado Megan en toda su vida. Finalmente decidió que no le quedaba otro remedio que intentar solucionar sus graves problemas y proponerle a Cesare un matrimonio de conveniencia con el que ambos saldrían beneficiados. Aunque era obvio que no la amaba, él nunca ocultó el deseo que sentía por Megan, y ella no perdía la esperanza de que algún día su marido la viera como algo más que un cuerpo atractivo que despertaba en él tanta pasión... El playboy italiano. Luca Di Rossi era el sueño de cualquier mujer: rico, guapo e increíblemente sexy. Jude no podía creer lo que veía cuando se encontró frente a frente con el hombre al que los periódicos tildaban de playboy. Y aún más sorprendida se quedó cuando Luca le dijo que debían casarse por el bien de ambos. Jude era consciente de que, en otras circunstancias, Luca ni siquiera la habría mirado. Ahora estaba locamente enamorada de un hombre que quería casarse con ella sólo para no perder la custodia de su hija. ¿Debería aceptar?