Con lucidez y valentía Rougier demuestra que entre 1944 y
1955 no hubo una política económica autónoma ni una estrategia de
desarrollo a largo plazo. Si bien se registró una primera etapa de
crecimiento industrial y expansión, la economía del peronismo quedó
encerrada en la redistribución de ingresos sin modificar la estructura
de la propiedad. Sus cuentas pendientes, como la escasa integración del
sector manufacturero y la subordinación a las exportaciones.
El período peronista se ha considerado hasta hoy una etapa decisiva en
la historia política y social argentina. Desde el punto de vista de la
economía, se lo ha visto como un punto de inflexión que habría
modificado de manera cardinal las relaciones sociales dando origen a una
industrialización pujante y a la emergencia, junto a una clase obrera
consciente de sus potencialidades, de una burguesía comprometida con el
desarrollo nacional. La industria y los derechos de los trabajadores
habrían sido los ejes centrales de un proceso conducido por el Estado
que habría dejado atrás el modelo agroexportador. Este libro se propone
cuestionar ese imaginario e indagar cuánto hay de cierto y cuánto de
mito en él.
Para la colección Nudos de la historia argentina hemos pedido a
historiadores de primer nivel que escriban libros sólidos pero a la vez
atractivos, susceptibles de ser leídos y disfrutados por personas
interesadas en la historia, aunque carezcan de una formación
universitaria en la disciplina. Esperamos estar a la altura del desafío.